El
maravilloso cerebro emocional de las personas con alta sensibilidad.
A veces no es fácil, en ocasiones resulta
complicado encajar en un mundo con “demasiados alfileres”, con demasiado ruido,
egoísmos y dobles intenciones. Los sentidos de las personas con alta sensibilidad (PAS) son tan vulnerables como
privilegiados, pueden sentir lo que otros no perciben, o hacerlo a en
una intensidad tan elevada que el mundo se muestra ante ellos con un abanico de
realidades que a otros, se nos escapan.
¿Qué hace en realidad que una persona con alta
sensibilidad sea de esta forma? ¿Es genético? ¿Por qué sufren más que
otros? ¿Por qué el amor es a la vez tan intenso y doloroso en sus relaciones?
¿Por qué disfrutan de su soledad y a la vez, sienten una profunda incomprensión
desde que son niños?
En el 2014 se publicó un interesante trabajo llevado a cabo en la Universidad de Stony Brook (Nueva York), donde se intentaba dar una
explicación sobre qué particularidades tenía el cerebro de una persona con
alta sensibilidad (PAS), y de qué modo podría diferenciarse de las personas
que no lo son, o que al menos, no presentan esa apertura emocional tan
característica.
Los resultados del trabajo llevado a cabo por
seis investigadores, fueron publicados en la revista “Brain and Behavior".Fuente: La revista indicada.